28 de julio de 2012

Las escobas nuevas siempre barren bien

No es miedo, ya no
No es dudar de amar
No es rabia contenida ni reencor.

Es conocer cada movimiento del género.
dime con quien andas y te diré quien eres, dime de lo que hablas y te diré de lo que careces.
No me agrada, ni ella ni las COMO ella.
no las tolero, no puedo verlas como mujeres, insisto, las mujeres son distintas... esas, son arpías.
Las conozco como a la palma de mi mano, como esa vieja excusa para engatuzar que usan habitualmente.
Las detesto, las aborrezco.
Son perdición y olvido.
Son la siembra del veneno que quedará instalado para siempre.
Son astutas, sigilosas y sobre todo dañinas.
Poco inteligentes, poco instruidas y muy cariñosas... capaces de dar todo lo que un hombre puede desear.
En el momento preciso, evitan, aniquilan y matan.


Las conozco y las detecto solo con mirarlas.
No me engañan, ninguna me ha engañado con su falsa piel de oveja.

A las mujeres de verdad si puedo reconocerlas, son valiosas y se distinguen por una seguridad y distincion que no todas tienen.
Por una valía interna, por un semblante distintivo, por un aroma inusual y un poco de agraz en la mirada. Lo dulce no es su potencial ni un arma poderosa.

Me gustaria que todas fuesen así, que todas respeten, que todas griten que el ser mujer y el no ser querida no te vuelve una arpía.

Pero esta lleno de aquellas, está lleno de venenosas, de reencororsas y con el alma podrida.
Esta lleno de hienas asechando cada paso de las mujeres reales.

Las mueve la envidia y la frustración.
Muchas veces por ser bellas, pero no lograr su cometido con el que creen indicado, las frustra, la golpea y las hiere... esa herida se va cerrando con el daño que le hacen a las demás, a la gente.
Ese daño es tan poderoso, que puede cambiar los destinos de dos de un momento a otro...

Tengo miedo y rabia, porque no las soporto y cada cierto tiempo hay una cerca.
Pero aquí quien permite que lleguen no soy precisamente yo.
¿ o es que son infalibles en una relacion? Si no aportan en nada ¿ por qué tenerlas cerca?

Solo hacen daño, solo desgastan, solo se entrometen dentro de las capas mas finas de la piel de ellos y los envuelven, cuando se dan cuenta ya es tarde... ya perdieron lo valioso, ya se rieron de ellos y ya han extraído lo mejor de sí y se han quedado vacíos, perdidos, sin amor real, sin palabras sinceras y sin una mujer de verdad.

Las escobas nuevas siempre barren bien.

7 de julio de 2012

Es extremadamente

"Es extremadamente raro que con tantos conocimientos alguien sea al mismo tiempo tan amable. He observado casi siempre que las mujeres instruidas tienen en el mundo una cierta rudeza; una especie de afectación que hace que se compre muy caro el placer de su compañía."

Esta frase es del divino Marqués. Aquél que hizo que mis instintos se normalizaran y no fueran estragos fuera de la norma.
Esta frase me la dieron, sin saber de quien provenía.
Y es que al recibirla no puedo más que pensar en los infortunios de ser quien soy, en la dicha y desdicha que convergen en mí y se abrazan a mi piel en cada momento mientras camino tranquila.

Y es que lo siento, lo que la cultura pedía de la mujer yo no puedo cumplirlo. Podría ser mas apasible, mas fragil tan solo si existiera un hombre, un sólo hombre que pueda entender que ocurre dentro de mis tormentas.

Quiero a uno, sólo a uno y no más que él podra tener mi amor eterno cuando entienda al fin, que sólo necesito un poco de amor real. QUE ME ENSEÑE, QUE ME DOMESTIQUE Y QUE PUEDA APRENDER DE ÉL NO SOLO ÉL DE MI. QUE ACEPTE Y ENTIENDA MIS ERRORES, TANTO COMO YO PUEDA ENSEÑAR DE LOS SUYOS

Quizas estoy afectada, de ese todo o nada que me envenena las ganas.
Quizas la totalidad que necesito no la encontraré jamás porque cuando la tuve, la desaproveché, no me entendió, no perdonó y me tiró al olvido.

Ser una mujer que vive los extremos es dificil, porque a pesar de tener tanta información dentro, de indignarse con las paradojas cotidianas y de amar apasionadamente ... no puedo encontrar el equilibrio.

Es dificil, a veces creo que me gustaría haber nacido frágil, dependiente, cariñosa y dulzona.
Pero cuando me enfrento a la realidad, créanme, odio la figura de la mujer indefensa.

Creo que mientras siga conforme conmigo misma, el mundo va a dejar de importarme.
Un hombre con los pantalones bien puestos y un horizonte indeleble, puede aceptar a una mujer así, porque sabe que las ganancias a pesar de el vaivén de su compañía serán mejores.
Porque una mujer así hace que un hombre crezca, conozca nuevos espacios e inherente mente le transmite su pasión que no es como esas pasiones comunes, sino de esas pasiones que se viven en el día a día, de esa que se demuestra en los gustos, en los "buenos días", en un simple "vamos a comprar pan".

Cuando un hombre se atreva a asumir este desafío sin achicarse ante las circunstancias, CREANME... SERÉ LA PRIMERA EN AMARLO Y NO DEJARLO JAMAS.


Por el momento vivo mi mala suerte en el amor...