3 de agosto de 2017

en la nada

Hay ratos de muerte.
De esa que te hace volver al origen, a los odios, a la rabia, al miedo.
Sin duda que es algo inevitable, pero cuando ocurre, no lleva precisamente a un recuerdo.
Es una sensacion de melancolia, que no tiene un nudo concreto... o quizas si y no lo recuerdo (Dejo abierta la posibilidad).
Te cruzas con tanta gente en la vida que es casi como tomar sorbos de una bebida, a veces dulce, agria o bien de la mejor...pero desvanecida.
No se por que todo lo asocio a comida, supongo que es por esa oralidad insatisfecha; que me hace descuartizar o amar algo siempre en esa totalidad.
El corazon, en esa funcion poetica, me ha funcionado quizas mas, si, mas que en la funcion biologica.
Y es que cuando uno menos lo quiere, empiezas a ver florecer sentimientos extraños. No, no son todos de amor. Son de rabia incluso hacia ti mismo. 
Yo creo que la gente se te cruza por motivos concretos. En este minuto, dandote la posibilidad de romper con toda esa idilica imagen del imposible casi perfecto. Será que de pronto esa fascinacion por lo imposible y la adrenalina la he llevado al limite. 
Entra en juego aqui, la fantasia, dentro de esta realidad que vivo. Se hace tan latente.... asi como ese corazon que ya no funciona solo en razon del organismo.
Ahora puedo notar de mejor manera el paralelo de la realidad y fantasia; cuando te atormenta, cuanto de empieza a podrir por dentro. No es ajena esa sensacion de estar en un territorio desconocido, aun en tu propio cuerpo, aun en tu propia mente.... vas descubriendo cosas que estan ahi, es una constante, un desafio. 
Puede ser que esta manera de ver las cosas y el mundo no sea del todo dulce e inocente.
Siempre estar al limite de ver, entender, vivir... no es agradable, duele, daña, enfurece.
Por que debes hacer que algunos comprendan lo que no ven, lo que ocurre.... pero, también hay tiempos. Cada uno tiene sus tiempos, sus procesos y ciclos e interrumpir aquello significa una violencia desmedida, tormentosa... 


A ratos me pregunto como sera el fin de esta otra historia paralela. De este amor que me ha hecho mas frágil, pero con una coraza mas dura por fuera. La gente no entiende que detrás de cada ser humano hay historias.... pero no estamos preparados para entender al otro. Mucho mas si la costumbre de entendernos a nosotros mismos no esta instalada. 

Hay un impostor en todo esto, yo no se si es Dios o el ser humano.



* Vuelvo a hablar de Dios, luego de haberlo suprimido mas de la mitad de mi vida.